LA ASOLADA VIVENCIA DE MILA ORTEGA
Tomás Martín Tamayo
LA VIDA ASOLADA
Mila Ortega
Ed. Con M de mujer
280
páginas
La autobiografía, aunque se alivie
con algo de ficción, es un género complicado porque el autor se obliga a
fragmentar su vida en una selección unidireccional de acontecimientos, como es
el caso de “La vida asolada”. Cabe preguntarse si la vida de Mila Ortega
no hubiera discurrido por otros derroteros, completamente diferentes, sin el
aderezo “asolado” que la embridó al tener que ensamblar su vida a la de una
hermana mentalmente discapacitada. Para bien o para mal, esa realidad marca un
rumbo, pero ¿y las otras realidades de las que se prescinde en la
autobiografía?
“La vida asolada”, a medio
camino entre lo autobiográfico y la ficción, es un relato conmovedor, con
personajes bien definidos y ambientaciones logradas. Escrita con pulcritud,
Mila Ortega nos lleva, sin brusquedad, a un mundo complejo, en el que las
circunstancias ajenas resultan determinantes. El “Yo soy yo y mis
circunstancias” orteguiano, se hace realidad en esta novela sosegada y sin
estridencias, porque incluso los pasajes más controvertidos se relatan con
calma y naturalidad. Está más visualizada la convivencia con enfermos de
Alzheimer, renales o disminuidos físicos que con los afectados psíquicos y eso
tiene de aportación singular esta historia, en la que se muestra la desnudez de
una convivencia difícil, donde se hace posible el entendimiento de dos
realidades diferentes. Cuidar y llevar de la mano a una discapacitada mental,
dejándola ser y haciéndola feliz sin mutilarla, es una enseñanza que “La vida
asolada” nos muestra: el día a día de una convivencia compleja, que solo se
supera con generosidad y mucho amor.
La conducta reiterativa, los
miedos, las manías y las visiones deformadas de una discapacitada psíquica y
física, deben hacerse insoportables más allá de los encuentros casuales. Es la
convivencia estrecha, la del desayuno, la del almuerzo, la de las 24 horas,
siete días a la semana, la que no puede franquearse sin una dosis muy
importante de humanismo, comprensión y tolerancia. ¿Quién cuida al que cuida?
La respuesta es determinante en esta narración, en la que la protagonista, la
que cuida, llega a desear entrar en el círculo mental de la cuidada.
Junto al encuentro con la
realidad que impone, sin solución, una discapacitada intelectual, “La vida
asolada” nos enseña la cara desconocida de sus miedos sin limitaciones, sus
goces sin disimulos y la franqueza de sus expresiones afectivas, para lo que se
hace imprescindible, además de grandeza y generosidad, saber transformar lo
difícil en oportunidad. La novela es una guía.
“Describes sin esfuerzo”, -le
dice uno de los personajes a la protagonista. Y así es, en esta novela hay más
lágrimas que sudor y la facilidad narrativa de Mila Ortega se hace patente en
descripciones que no necesitan de la imaginación. Hay momentos muy logrados de
exposición fotográfica y escenas que se visualizan con precisión, porque todo
fluye de forma natural y sin empujones narrativos.
Como aderezo, se
afronta en “La vida asolada” una relación de amistad consolidada entre dos
amigas de la infancia, que se conocen y se tratan sin ocultaciones ni
recovecos, aunque dejaremos, para goce del lector, las alteraciones que se dan
en una narrativa tan aparentemente lineal y carente de sorpresas.
“La vida asolada” es la
segunda entrega novelística de Mila Ortega, tras “Los suicidios de Victoria
Fontaine”. “Álgebra esencial” (poesía), “Hija de la muralla” y “Una firma en el
agua” (relatos).
*Si desea
recibir mis artículos directamente envíe un correo electrónico a:
tomasmartintamayo@gmail.com. Todos los envíos se hacen por consentimiento
expreso del solicitante. Si los recibe y no quiere seguir recibiéndolos,
indíquelo a ese mismo correo.
*A excepción
del correo electrónico facilitado, no se dispone de ningún otro dato sobre los
suscriptores. En la mayoría de los casos se ignora incluso la identidad del
titular.
*En los
artículos remitidos no se incluye ninguna publicidad y su reenvío es
absolutamente gratuito.
*Todos
mis artículos están abiertos en el Blog Cuentos del Día a Día y se publican en
las ediciones, impresa y digital, de los periódicos HOY y El Norte de Castilla.
En
virtud de la Ley Orgánica 15/1999 de 13 de diciembre, de Protección de Datos de
Carácter Personal, tanto este mensaje como todos los posibles documentos
adjuntos, son confidenciales y están dirigidos exclusivamente a los
destinatarios de los mismos. Por favor, si no es uno de ellos notifíquemelo y
elimine el mensaje.
No hay comentarios:
Publicar un comentario