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El pasado domingo, en las horas previas a la final de la Eurocopa,
había cientos de banderas engalanando los balcones de Badajoz. Por el centro de
la ciudad familias enteras con las camisetas rojas y envueltos en la bandera de
España, identificando a la bandera como un complemento de los colores de la
Selección. Intuyo que esos niños
consideran que camiseta y bandera forman un todo y que nadie les ha explicado
que el fútbol es un deporte y que la bandera que usan de complemento decorativo
es la enseña nacional, el símbolo que identifica a España y debería unir a
todos los españoles, por encima de banderías territoriales y de nacionalismos
catetos. Hoy, después de los éxitos encadenados de la Selección, la bandera de
España sirve para unir a los amantes del fútbol y para dar lustre a los trofeos
conseguidos. Creo que podemos afirmar que la Selección tiene bandera y que cada
día la bandera es más de la Selección que de España..
Me comenta Pepe Aroca que en la fachada del Instituto Cervantes de
Berlín, donde se supone que luce la enseña nacional, apareció una pintada: “Este país no existe”
¿Existe? El hecho de que se plantee la interrogante ya entraña una duda y de la
duda a la negación el tiempo que tarda el gallo en cantar tres veces… España se
está desmembrando por decisiones que, en el fondo, tienen el mismo calado que
la independencia real de sus territorios. Es difícil entender a un país en el
que la cohesión de derechos y obligaciones se quiebra en las fronteras de cada
comunidad autónoma. El copago farmacéutico se paga aquí, pero no allí. Éste se
puede prejubilar, pero aquél no. En Euskadi se administran sus impuestos y aquí
los aportamos al común. Cataluña marca el paso de su soberanía y los demás le
hacemos el pasillo, como la selección española a la italiana tras el partido…
Aquí la bandera de España es nuestra bandera y allí la retiran o lucen en el
mástil unos jirones mugrientos para humillarla y humillarnos.
Con acierto Carlos Caldito decían antes del partido: “Si llevas hoy una
bandera nacional eres de “la roja”, pero si la llevas mañana eres un facha”.
Complicado, porque los separatistas la ocultan y la rechazan porque es la
bandera de España y, fuera de las competiciones deportivas, en España se la
rechaza porque es cosa de fachas, pero los fachas no la quieren y lucen la
preconstitucional, la del águila. Yo
llevo una pegatina con la bandera de España en el coche, al lado de la matrícula
trasera, y en Bilbao un guardacoches me recomendó que la despegara porque
podían “arañármelo o algo peor”. Pero es que en el aparcamiento de un híper de
Badajoz un necio me dio su veredicto: “¡Cómo os gusta a los fachillas la
banderita por todas partes!…”
Tenemos un himno sin letra, compitiendo con otros diecisiete y una
bandera a la que sólo se reivindica en las competiciones deportivas. Hoy ha
desaparecido de casi todos los balcones y España vuelve a ser la abanderada de
los sin bandera. Cosas.
2 comentarios:
Hola, muy buen texto, tienes parte de razón.
Pero no es totalmente así, la bandera Española hondea en un pequeño mástil en mi casa desde que empezó la Eurocopa, y aun va a seguir ahí hasta que Dios quiera, hubiésemos ganado o perdido, yo estoy orgulloso de mis país y de mis colores.
Yo soy de un pequeño pueblo de Valencia y hay bastantes banderas Españolas en los balcones...
Y la verdad es que no es normal si no es por motivo de alguna celebración llevar una bandera por la calle sea de lo que sea la bandera.
Por cierto me preguntaba si me darías permiso para poner esta entrada tuya en mi blog, pondría por quién esta escrita y las webs que me dijeras. Gracias, un saludo.
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