Hay que reconocerle a Guillermo Fernández Vara que durante su etapa de presidente asumió más los fracasos que los aciertos. Sin paliativos, hizo suya la responsabilidad del paro en Extremadura y esa fue su cruz durante casi toda la legislatura: “Reconozco que llegué prometiendo crear empleo y estoy contando parados. Ese es mi mayor fracaso, asumo mi responsabilidad”. No se si fue muy político, pero desde luego fue honrado y valiente. Monago y su vicepresidenta je, je, je, esperaban cada mala noticia para poder arremeter contra Vara y contra su consejera de Empleo, a la que tildaban de “lástima” “pena”, inútil, calamidad… Con cada parado hacían vudú y se lo clavaban a Vara como alfileres a un monigote, e incluso sacaron del baúl la cantinela de Aznar, “márchese, Sr. González”, sólo que aquí era “márchese, Sra. Lucio”. ¿Ahora no se tiene que marchar nadie?
Entonces sabíamos que, desde el primero, los parados eran de Vara, pero ahora, además de parados están huérfanos porque nadie asume la responsabilidad de su situación. ¿Siguen siendo de Vara? ¿En qué momento pasarán a ser cosa de Monago y de su vicepresidenta je, je, je, que ahora dice que es un problema global? El caso es que en la cartelería para el 20-N siguen insistiendo con que “lo primero el empleo”. ¿El empleo de quien? No deben considerarlo muy prioritario porque la consejera de Empleo lo compatibiliza con otras cuatro cosas y el gerente del SEXPE sólo le dedica media jornada. Eso sí, si la globalización es global, ¿por qué ha subido en Extremadura el doble que la media nacional?
La vicepresidenta je, je, je, que durante años se ha nutrido sacando a la palestra casos de enchufismo y nepotismo, y que en eso sigue (¡cosas veredes, querido Sancho!…), se ha convertido en la “mujer orquesta” y ha asumido, entre otras múltiples ocupaciones, la responsabilidad del empleo, pero en tres meses ha descubierto que el paro, pese a lo que ella creía y ordeñaba, es cosa de la globalización y que sus responsabilidades, como consejera de Empleo, no parecen ir más allá del ámbito familiar. Hasta Monago, los parados tenían como padrecito a Vara, pero ahora la vice, qué lista, dice que son hijos de esa entelequia recurrente que es la globalización. En apenas tres meses hemos pasado de 119.593 a 132.750, la mayor subida en el menor tiempo: 13.157 nuevos parados, a pesar de que “lo primero es el empleo”... ¿En qué quedamos, es global o autonómico? Depende de quien mande.
A los pocos días de haber logrado la ansiada foto con los sindicatos y la patronal por el primer plan de empleo de la era Monago, desde CCOO ya piden la dimisión del gerente del SEXPE y en UGT tildan los nuevos datos como “desastre sin paliativos”. Ganas de enredar ya que “la doñita del gran poder” dice que no tenemos nada que hacer porque el tema del empleo lo ha trasferido ella a la glo-ba-li-za-ción. Hay estupideces que, además de globales, son universales. ¡Doña je, je, je!
Entonces sabíamos que, desde el primero, los parados eran de Vara, pero ahora, además de parados están huérfanos porque nadie asume la responsabilidad de su situación. ¿Siguen siendo de Vara? ¿En qué momento pasarán a ser cosa de Monago y de su vicepresidenta je, je, je, que ahora dice que es un problema global? El caso es que en la cartelería para el 20-N siguen insistiendo con que “lo primero el empleo”. ¿El empleo de quien? No deben considerarlo muy prioritario porque la consejera de Empleo lo compatibiliza con otras cuatro cosas y el gerente del SEXPE sólo le dedica media jornada. Eso sí, si la globalización es global, ¿por qué ha subido en Extremadura el doble que la media nacional?
La vicepresidenta je, je, je, que durante años se ha nutrido sacando a la palestra casos de enchufismo y nepotismo, y que en eso sigue (¡cosas veredes, querido Sancho!…), se ha convertido en la “mujer orquesta” y ha asumido, entre otras múltiples ocupaciones, la responsabilidad del empleo, pero en tres meses ha descubierto que el paro, pese a lo que ella creía y ordeñaba, es cosa de la globalización y que sus responsabilidades, como consejera de Empleo, no parecen ir más allá del ámbito familiar. Hasta Monago, los parados tenían como padrecito a Vara, pero ahora la vice, qué lista, dice que son hijos de esa entelequia recurrente que es la globalización. En apenas tres meses hemos pasado de 119.593 a 132.750, la mayor subida en el menor tiempo: 13.157 nuevos parados, a pesar de que “lo primero es el empleo”... ¿En qué quedamos, es global o autonómico? Depende de quien mande.
A los pocos días de haber logrado la ansiada foto con los sindicatos y la patronal por el primer plan de empleo de la era Monago, desde CCOO ya piden la dimisión del gerente del SEXPE y en UGT tildan los nuevos datos como “desastre sin paliativos”. Ganas de enredar ya que “la doñita del gran poder” dice que no tenemos nada que hacer porque el tema del empleo lo ha trasferido ella a la glo-ba-li-za-ción. Hay estupideces que, además de globales, son universales. ¡Doña je, je, je!
1 comentario:
La función del SEXPE es buscar trabajo en equidad de derechos para todos y seleccionando los candidatos adecuados bajo esas premisas. Si hace lo contrario, dar trabajo profesional y cualificado únicamente a personas con titulos universitarios (malinterpretando a su antojo el reglamento en España sobre enseñanzas superiores) está comentiendo errores, pues excluye a profesionales con titulos superiores y capacitados que no han estudiado en la universidad. En conclusión produce desigualdad de derechos y exclusión social
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