miércoles, 26 de febrero de 2014

YO VOTÉ A RAJOY

                                        La calma del encinar
                                 YO VOTÉ A RAJOY
                                                           Tomás Martín Tamayo
                                                           tomasmartintamayo@gmail.com

“¿Votaste a Rajoy? Pues vete a la mierda”. Así de tolerantes se expresan algunos en las redes sociales. Desde que Rajoy comenzó a hacer exactamente lo contrario de lo que había prometido, arrecian las descalificaciones hacia los que lo votaron, entre los que me encuentro, porque yo voté a Rajoy. Ya llevábamos en Extremadura unos meses “amonagados”, pero aún así y por aquello de “la altura de miras”, quise pensar que Rajoy merecía un voto de confianza y lo voté. Lo voté confiado e incluso ilusionado, convencido de que lo más urgente era pasar la página del “contador de nubes”. Y también porque la alternativa era Zapalgaba. De nada sirve ahora andar con llantinas porque el voto que le di, junto a otros 10.830.692, que también se tienen que ir “a la mierda”, fue para cuatro años. En las elecciones no existe la moviola ni las segundas oportunidades para los electores y una vez que depositamos la papeleta, “santa Rita, santa Rita, lo que se da no se quita”. Nosotros tenemos un día para votar y cuatro años para jurar en arameo si la cosa sale rana. Una vez más salió sapo.

Con nuestro sistema electoral, el partido elegido no tiene que dar explicación alguna y los diputados, una vez elegidos, entregan su fidelidad y su lealtad al partido, haciendo un sonoro corte de mangas al electorado que los eligió. Si el partido se lo pide, a ninguno de ellos se le cae la cara de vergüenza por votar contra los intereses de su propio electorado y no por eso se encierran en sus casas avergonzados. Así, puede darse el caso, como se está dando, de que prometieran lluvias y nos den sequías. Perversión total de una clase política que no contrae compromiso alguno con los electores más allá del bla, bla, bla mitinero o el papel mojado de los programas electorales. Los diputados, aunque los paguemos nosotros, son y se deben al partido. ¿Hay que recordar otra vez que estamos en una “partitocracia”?

Dos años después, el Gobierno de Rajoy se ha puesto de espaldas a su electorado, porque al margen de las dificultades que se encontró, está haciendo lo más fácil, masacrando a los más necesitados, a las clases medias, a los jubilados, castigando a los trabajadores, a los autónomos… y poniendo mullidas alfombras al paso de las grandes fortunas, que siguen de perfil, porque mientras peor nos vaya a los demás, más se agrandan las distancias y mejor les va a ellas. ¿Podemos estar satisfechos los casi once millones que confiamos en Rajoy? La mayoría sólo ha recibido un suma y sigue, espuelas y sal en la herida abierta por ZP, el gran botarate. No hace falta que nos zahieran, nos incriminen y que nos busquen como si fuéramos delincuentes, porque cada elector tiene su cruz. Además, si nos tenemos que ir “a la mierda”, en la mierda se va a encontrar toda España porque ¿adónde tienen que irse los que votaron a Zapatero? ¿Ellos no tienen que arrepentirse de nada?  Y si descendemos al ámbito extremeño ¿adónde tienen que irse los que votaron a IU?


Bien está así, no nos flagelemos porque aquí hay velas para todo los palos. Nos ponemos alegretes, los creemos, nos lanzamos a la urna y después, como siempre votamos contra alguien, resulta que “ni contigo ni sin ti tienen mis males remedio”. Dejemos la mierda para los que nos engañan, porque “si hay que ir se va, pero ir “paná” es tontería”.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Le felicito por la sinceridad y valentía de, primero, revelar a quién votó, y segundo, no dudar en criticar a quienes le han defraudado. Lo bueno único bueno es que los españoles cada vez estamos más escaldados y a la próxima se van a enterar.

Anónimo dijo...

y sino qué? votas al dictador de la coleta que por cierto ha ganado más pasta el año pasado que Rajoy, al igual que el gáfitas o el del monedero, Ya se sabe el dicho sales de málaga y entras en malagón.

Anónimo dijo...

O nos enteraremos todos. Porque os recuerdo que si estamos mal es gracias a la politica de zapatero y que en cuatro años no se levanta un pais. Yo se que las cosas no van todavia lo bien que esperamos. Pero podrian ir peor, sino mirar hacia otros paises, que yo sepa solo los paises de derechas tienen su economia saneada. Demos un voto de confianza por lo menos los mismos ocho anos que tardaron los socialista en hundir el pais. Yo vote al pp.