viernes, 29 de febrero de 2008

¿Quién ganó el debate?





Casi 14 millones de televidentes seguimos el debate entre Rojoy y Zapatero, viendo, oyendo y calibrando en directo la fiabilidad de cada uno de los contendientes. ¿Necesitamos que alguien nos explique lo que acabábamos de ver y de oír? Parece que sí. Algunos listillos, que viven del rebusco y cobran por rematar faenas, consideran que esos 14 millones de personas somos necias de remate y necesitamos ser guiadas, adoctrinadas y conducidas de la mano, para que podamos entender claves secretas que sólo ellos conocen. No importa que uno de los contendientes huya, cruce la vista, se vea arrinconado, incapaz de responder y caiga de bruces sobre la lona, porque ellos, los listos, están ahí para hacernos ver y oír lo contrario de lo hemos visto y oído… ¡Qué falta de respeto!

¿Quién ganó el debate? Pues depende del listo al que escuchemos, depende de la alineación política del listo y depende del interés del medio en el que los listos se expresan. No es igual escuchar a los de El País, la SER, la Cuatro o la Sexta, que a los de El Mundo, La COPE… ¡Casi todas las cadenas de televisión parecen tener todas el mismo sesgo! Donde unos ponen el acento otros ponen la coma y resulta que después de haber estado casi dos horas frente al televisor, siguiendo atentamente el debate, en tres minutos unos supuestos expertos nos traducen lo que hemos visto y oído para que lo entendamos, porque lo que vale es lo que ellos nos cuentan, que para eso son listos. Y la rechifla y el mangoneo mayor no están en la opinión de los espabilados, sino en los supuestos sondeos telefónicos, qué risa, que en media hora hacen otro más listos todavía.

¿Quien ganó el debate? No seré yo el que responda porque no tengo carné de listo, pero creo que los 14 millones de personas que estuvimos frente al televisor merecemos algo más de respeto, porque es de suponer que todos, absolutamente todos, no podemos ser necios de capirote y tenemos capacidad para oír, ver y entender. Si el rebaño, que algunos creen que somos, tiene que ser guiado por la cañada para que no se pierda, lo que podían es ahorrarnos el esfuerzo de votar el próximo 9 de marzo y que sólo decidan ellos, los inteligentísimos analistas. Los listos, en apenas una hora y tomándose unas cañas, podían resolvernos a la piara el contencioso de las urnas, evitándonos el desasosiego que nos produce ser tan rematadamente imbéciles.

¿Quien ganará el debate el próximo lunes? ¡Será igual, nos guiarán, nos intoxicarán para que no podamos decidir! Ni votar en paz.



viernes, 22 de febrero de 2008

Zapatero, talante y talento




Los micrófonos “cerrados” están empeñados en sacarle los colores a Zapatero. En una ocasión propagaron cómo Jordi Sevilla se ofrecía para darle unas clases de economía y Zapatero, que pone la misma cara cuando recibe un beso que un estacazo, se limitó a parpadear porque la evidencia de su desconocimiento no le dejaba otra salida. Ahora, más de los mismo, los micrófonos “cerrados” vuelven a mostrarnos la otra cara del afable Zapatero, el señor del talante, incapaz de decir veinte palabras seguidas sin incluir “paz”,”democracia”, “diálogo” y “consenso”. El buen señor parece seguir en el parvulario, en aquellas clases en las que el maestro proponía construir una frase con cuatro palabras y un verbo.

Ya de pié, con los hombros elevados, los brazos en horizontal, como si unos hilos invisibles dirigieran sus movimientos desde arriba, Iñaki Gabilondo le preguntó por los sondeos y Zapatero desplegó la estrategia real de la campaña socialista: tensionar y dramatizar: “nos conviene tensionar y la próxima semana yo comenzaré a dramatizar”. Todo un descubrimiento, porque muchos creíamos que se había quedado exclusivamente con “paz, democracia “diálogo” y consenso” y el desliz evidenciaba que también conocía “tensionar y dramatizar”, que hasta ahora eran los verbos con los que señalaban al perverso Partido Popular.

De momento, hasta que la imprudencia no descienda por la pendiente del olvido, el ejército de predicadores oficiales guarda silencio, porque el descuido de Zapatero ha desmontado la estrategia de la crispación de sus corifeos. Tanto tiempo, tanto esfuerzo, tanto empeño y tanta pasta gansa cobrada por propagar cómo el Partido Popular tensionaba y dramatizaba y ahora, de una sola tacada, Zapatero nos aclaraba que son el Gobierno, el PSOE y él mismo, los que crispan y dramatizan la vida política. Ahora toca tensionar

Se sabía que en el fondo de algunas de las acciones más sonoras de Zapatero sólo había crispación e intolerancia, porque ya habíamos probado el guiso de su talante, vía “educación para la ciudadanía”, “acuerdo parlamentario para dialogar con ETA”, “Ley de recuperación de la memoria histórica”, sin olvidar los estatutos a la carta porque, “el concepto de España es revisable” o a sus interlocutores para paz, Arnaldo Otegi, De Juana Chaos…

El señor trastabillado, de mirada azul-hielo y risa indefinible que, según consta, Alfonso Guerra definió como “bambi” y Felipe González como “bobo solemne”, ha demostrado que no era una cosa ni la otra y que tenía una hoja de ruta perfectamente marcada. Él y su talante son los que han sacado a pasear al espantajo de la Guerra Civil. “Divide España y vencerás” debería ser su eslogan de campaña.

¡Todo un hombre de paz!

viernes, 15 de febrero de 2008

Voz para el Islam, silencio para la Iglesia



Junta Islámica Española, que es para los islámicos algo parecido a la Conferencia Episcopal para los católicos, ha emitido un comunicado pidiendo el voto para Zapatero. Indican que hay que votar a los partidos progresistas que, según los progresistas islámicos, son PSOE e IU, aunque suena a coña que semejante inclinación hacia el progresismo llegue de la mano de los que tanto respetan a las mujeres, a los homosexuales, a otras confesiones… ¡Seguro que en cualquier país islámico Cerolo y compañía serían recibidos con alfombras persas y pétalos de rosa a su paso!

Naturalmente, la generosa donación que el Gobierno de Zapatero entregó el año pasado a la Junta Islámica, no tiene nada que ver con la predilección de los islamitas, pero si la Iglesia católica recibiera, persona a persona, la misma cantidad por cada uno de sus feligreses que recibe la Junta Islámica, el Concordato debería ser revisado, pero para multiplicar por once la cantidad que recibe la Iglesia Católica.

Si el progresismo de la Junta Islámica se identifica con el de Zapatero, creo que los socialistas deberían ponerlo en cuarentena, porque dime quien te aplaude y te diré como eres. ¿Puede la Junta Islámica emitir un comunicado a favor de Zapatero mientras que la Iglesia Católica debe permanecer muda, ciega y sorda, so pena de ser tachada de “integrista, trasnochada, fascistoide y ultra conservadora?. Pues nada, aceptemos pulpo como animal de compañía y aceptemos que la tolerancia, la pluralidad, el respeto a las ideas y a la vida están más cerca del mundo islámico que del católico. No seré yo el que cuestione el progresismo y la tolerancia de la Junta Islámica, que luego pasa lo que pasa, ustedes ya me entienden.

¿Se imaginan a un islamita atacando a la cúpula del Islam? Yo lo pienso y me da la risa tonta. Sobre todo cuando oigo al confesional José Bono, tachar de integrista a la Iglesia Católica por haber emitido un comunicado en el que, sin pedir el voto a favor de nadie, recuerda sus postulados de siempre. ¡Qué fácil es atacar a la Iglesia Católica, sabiendo que sale gratis!

Seguro que en el Islam también tienen a su Pepe Bono con turbante, pero el de allí se cuidará muy mucho antes de decir ninguna gilipollez, porque nadie ignora que con el Islam no se juega y que el que juega se la juega. Aquí podemos incluso publicar fotos porno blasfemas de Jesucristo, con dinero público, pero allí cuidadín, cuidadín, que por una caricatura de Mahoma pueden correr ríos… ¡Ríos de tolerancia, claro!

¿Los progresistas islámicos con Zapatero? Que Alá los bendiga.

viernes, 8 de febrero de 2008

El baile del oso y la trompeta


Imperturbable, con la puntualidad anunciada y esperada, el Gobierno de Zapatero usará una vez más a Conde Pumpido, Fiscal General del Estado, para instrumentalizar el terrorismo en su favor e ilegalizar -¡a buena hora!- lo que nunca debió ser legalizado. Hace menos de un año negaban la conexión de ETA y Batasuna con el PCTV y ANV, porque la senda para encontrarse con ETA así lo exigía y ni el eco de las bombas de la T-4 de Barajas, con sus dos víctimas, disuadieron a Zapatero de su despropósito. Tampoco las pistolas y explosivos robados en Francia, ni la alerta de la policía francesa sirvieron de nada, porque él tenía marcada una ruta de diálogo con la banda terrorista y, como un camicace, todo lo supeditó a ese fin. Zapatero no quiso ver que ETA tenía su propia estrategia y cayó en la red de los terroristas, como una codorniz encelada.

Negaron lo evidente porque estratégicamente les convenía y para eso utilizaron a Conde Pumpido, que bendijo el esperpento y permitió que los dos partidos, sucursales políticas del terrorismo, se presentaran como corderos a las elecciones autonómicas y municipales. Se hizo un descarte estratégico de las listas electorales para barnizar el disparate y el propio Fiscal General compareció ante los medios de comunicación, todo contrito, para manifestar su sentimiento de que “tal vez nos hayamos pasado al no permitir que se presenten muchas listas y dejar a una parte importante del electorado sin su referente electoral” ¿Ignoraba el Gobierno y su Fiscal General lo que sabía toda España, lo que voceaba la policía francesa y gritaban las propias fuerzas de seguridad del Estado? Mal si no era así y peor si así era.

Ahora toca ilegalizar lo ayer legalizado porque, como ayer, prima la estrategia electoral por encima de todo y el Fiscal General parece tener asumido que su única misión es servir de red para las piruetas circenses de Zapatero. Ya lo tienen todo previsto y sólo esperan el momento electoralmente adecuado, para publicitar la ilegalización de los socios de ETA. ¡El bochorno de una decisión supuestamente de Estado, sometida a la conveniencia electoral de un partido!

Han agotado la legislatura acusando de usar el terrorismo a los que alertaban del disparate y ahora, como han hecho siempre, utilizan el terrorismo como baza electoral. ¡Llegaron por bombas y acaban con pedorretas! ¿Qué ha cambiado? ¿Han hecho los del PCTV y ANV algo diferente? No ha cambiado nada y Zapatero sigue creyendo que el electorado es un oso domesticado, al que se hace bailar con el sonido estridente de una trompeta. O con 400 euros.

miércoles, 6 de febrero de 2008

Siempre hasta luego


Considero a estas páginas como un habitáculo más de mi propia casa y no es fácil salir de lo que uno quiere, pero la vida es movimiento y a mi me gusta caer para poder levantarme. Siempre ha sido así. Creo que es conveniente empezar a cada trecho y, en ocasiones, puede ser hasta bueno desandar lo andado y volver a pisar nuestras propias pisadas. Viene esto a cuento porque por una temporada, no sé si corta o larga, me ausentaré de este espacio, aunque seguiré su pulso y el latido de todos los que aquí escriben y se desperezan. No olvidaré que aquí se me brindó posada cuando me vinieron mal dadas y tampoco me sentiré ajeno a nada de lo que aquí pueda ocurrir.

Tengo una oferta para retornar al periódico impreso de mis orígenes y, de momento, me satisface volver y hacerlo con la visión, nada conformista, que me ha aportado unos años de ausencia. Allí voy, allí vuelvo, con mi atillo de opiniones y la esperanza de que se me acoja con la misma generosidad que aquí. Me gustaría simultanear mi presencia, pero se impone el criterio empresarial del medio, que exige exclusividad, y no podré hacerlo. Dicho queda, me voy pero me quedo y me quedo pero me voy. Al fin y al cabo casi es lo mismo, la vida sigue. el tiempo no para su latido por quiebros insignificantes y, la verdad, yo me sé poca cosa.

Me voy en plena trifulca entre la Conferencia Episcopal y el Gobierno/PSOE/Zapatero. Me voy comprobando, otra vez, como los libertarios acaban en liberticidas que quieren silenciar la voz de un colectivo como la Iglesia que, si acaso, ha estado callado demasiado tiempo. ¿No pueden la Iglesia manifestar su criterio? ¿Tiene que comulgar con el cambalache, la entrega y la mentira?

Me voy cuando los precios van sin freno y el Gobierno, con el guiño electoral más vergonzoso de la historia democrática de España, pretende comprar votos a precios de saldo, ingresándonos 400 euros a cada contribuyente. 400 euros que cobrará la Duquesa de Alba, Botín o el dueño de Zara, pero que no llegará a los más necesitados. A todos aquellos que por no superar el mínimo, están exentos de la declaración de la renta.

Me voy cuando los últimos datos sobre la población activa denuncian que España es el país de la Unión Europea donde más aumentó el paro el año pasado. Y si España es el país con más crecimiento de paro de la UE, Extremadura es la Comunidad con la peor tasa de España.

Me voy cuando el sector de la industria alimentaría alerta con cierres y despidos masivos por la subida de los precios y la consiguiente bajada en la demanda por parte de los consumidores. Y cuando la Asociación Internacional del Transporte aéreo pronostica el mayor descenso en la EU del tráfico aéreo, por la incertidumbre económica que se cierne sobre España.

Me voy, pero si vuelvo me gustaría hacer un guiño a la esperanza y no acordarme de que España, un mal día de pesadilla, tuvo un presidente que se llamaba Zapatero.